RESTAURACIÓN Y ANTIGÜEDADES

Aprovechar piezas antiguas es una opción sostenible con la que llenarás de encanto tu casa. Puedes rescatar viejos armarios, mesas o mesitas. Inspírate con estas ideas.

01. SUELOS QUE HAY QUE LUCIR. Con un suelo de madera cualquier piso parece más bonito, luminoso y hasta grande. Si tienes uno original, restáuralo. En función de su grosor los puedes pulir varias veces.

 02. RENUEVA LA PUERTA DE ENTRADA. Dice mucho más de lo que crees. Puedes pintarla o convertir una puerta ciega en una con cuarterones acristalados. Además de estilo y ligereza, abrirás paso a la luz.

 03. UNA PIEZA QUE DECORA POR SÍ SOLA. ¿Quieres darle estilazo a tu recibidor sin grandes cambios? Decóralo con un mueble antiguo y lo conseguirás. Una cómoda de herencia es una buena elección: sus cajones ponen orden y su silueta, carácter. Menos es más. No la tapes con muchas cosas, y decora la pared en la que se apoya con un cuadro sencillo o un espejo.

 04. PIEZAS QUE VUELVEN A NACER. Una antigua mesa de centro con sobre de madera puede lucir perfecta unos años más con una mano de pintura. Si usas chalck paint no tendrás que tratarla antes.

DICCIONARIO EXPRÉS.

A.

Antigüedad. Se considera antigüedad aquella pieza realizada artesanalmente que tiene más de 100 años de vida.

Almoneda. Los muebles que tienen entre 50 y 100 años de edad y cierta calidad son considerados de almoneda. Deben estar hechos con materiales nobles por artesanos.

 D.

De oficio. Son piezas creadas para dar servicio a una profesión concreta. Mesas de arquitectos, muebles de imprenta, mostradores de tiendas son algunos muebles emblemáticos.

 I.

Industrial. Son piezas recuperadas, o inspiradas, en las que se usaban en fábricas y almacenes. Hechas de madera o metal y con un sentido muy práctico como lámparas, archivadores. mesas…

 V.

Vintage. Anglicismo que se usa para referirse a los muebles originales de antes de los 90, muy apreciados por su estilo.

EL SABOR DE LOS MUEBLES RESTAURADOS

Aprovechar muebles restaurados o cualquier pieza antigua es una opción sostenible con la que llenaras de encanto tu casa. Puedes rescatar viejos armarios, lámparas o mesas. En SAN XUAN te damos varias ideas para que te inspires.

Una mesa tocinera en el comedor. Empleadas originalmente como superficie de trabajo, las mesas tocineras son de las piezas mas buscadas. Las pequeñas cumplen función de auxiliares, mientras que las grandes son perfectas para la cocina o el comedor. Si la usas para comer, alarga sus patas con ruedas o tacos para evitar que su faldón con cajones resulte incomodo. Si la destinas a superficie de trabajo en la cocina, protégela de la humedad y de los cambios de temperatura con aceite de linaza.

Renueva la tapicería del sofá. El desgaste de un sofá suele apreciarse en la tapicería. Si no quieres cambiarlo por uno nuevo, piensa que entre retapizarlo o encargar una funda a medida no hay mucha diferencia de precio. Lo primero cuesta entre 500 y 700 euros sin tela y lo segundo, entre 380 y 480 euros para uno de tres plazas. Elige telas de composición mixta y será mas duradero.

Una mesa de centro de aire rustico. Si quieres realizar un mueble con materiales recuperados, te sugerimos que empieces por auxiliares, como una mesa de centro, y luego incrementa el tamaño y la dificultad. Sírvete de lamas de parquet, materiales de derribo o elementos como palets y cajas de madera. Lo mejor es que optes por proteger la madera sin modificar su aspecto natural ni las huellas del tiempo.

Un armario restaurado. Un armario antiguo se convierte en un verdadero tesoro debidamente restaurado. Puedes pintarlo, lacarlo o decaparlo. Antes, asegúrate de que no este descuadrado, revisa las bisagras y supervisa las grietas en la trasera.

Un aparador de madera reciclada. Junto al comedor y al office, un aparador es el aliado perfecto para tener a mano la vajilla y demás enseres para vestir la mesa. Sin embargo, a su función practica hay que sumarle la meramente decorativa. A la hora de ubicarlo aléjalo de las fuentes de calor, que agrietan la madera, y del sol directo, que vela el acabado.

Una puerta hecha cabecero. Una puerta recuperada, un biombo o unos tablones de madera pintada. Piensa una nueva vida para todo tipo de elementos en desuso. Para realizar un cabecero se recomienda que este sobresalga unos 20 cm a cada lado de la cama y que su altura sea proporcional al techo. Si eliges una puerta, primero deberás quitar los herrajes y las bisagras y rellenar los posibles desperfectos. Antes de pintarla, lija la superficie para que la pintura se adhiera bien.

Un suelo de madera con muchas décadas. El paso del tiempo deja su huella en la madera, que cambia de color y se desgasta. Ahí radica, en parte, el valor de un suelo de madera maciza. Gracias a sus 20 mm de grosor permite efectuar un pulido cada 10 o 12 años, lo que prolonga su vida útil. Un consejo decorativo: rellena algunas grietas con masilla de un color que combine con la decoración de tu casa.

Efecto desgastado. Temperatura y humedad son las responsables del bello toque imperfecto de los muebles. En lugar de disimularlo puedes realzarlo, y hasta exagerar ese efecto desgastado, para imitar el paso del tiempo redondea las esquinas y hunde las vetas de la madera mas clara.

Combina piezas de distintos estilos. No tengas miedo a mezclar piezas de diferentes épocas o procedencia ya que los opuestos se compensan. Opta por pocas piezas, pero protagonistas, capaces de llevar el peso decorativo de la estancia. Suma varias piezas. En mercadillos de objetos vintage se encuentran muchas pequeñas piezas que, combinadas con imaginación, consiguen un delicioso efecto.